¿Sinceramente? Pues porque tiene cimientos. Pero imaginemos por un momento que no estuviera anclada al suelo, sino que simplemente se posara. ¿De qué depende que se caiga algo o que no? ¿Por qué no vuelca?
Todo depende de la posición del centro de gravedad. ¿Y eso qué es? El centro de gravedad de cualquier objeto, es un punto imaginario sobre el que actuaría el peso del objeto (en grandes rasgos). Pues bien, siempre y cuando la vertical del centro de gravedad se encuentre dentro de la base de la torre, ésta no volcará.
La manera más sencilla de encontrar el centro de gravedad de un objeto es usar sus simetrías (siempre que las tenga, claro!) Para ello, trazando las diagonales de la torre, de forma aproximada vemos que el centro de gravedad cae más o menos donde indica el punto rojo.
Pues mientras la vertical (en azul) de ese punto rojo se encuentre dentro de la base de la torre (su "sombra" caiga dentro de la base), la torre no volcará. Podemos ver que conforme se vaya inclinando, la vertical del centro de gravedad se irá acercando al límite de la base. ¿Cual sería el caso límite? Pues el de las Torres KIO por ejemplo:
En este caso, vemos que el centro de gravedad cae justo sobre la viga vertical. Por lo que, de no estar cimentada, estaría a puntito de caerse.
La posición del centro de gravedad nos puede llevar a ver cosas tan paradójicas como el típico juguete del pájaro que se sujeta por el pico y no se cae. En este caso, las puntas de las alas compensan el peso del pájaro y sitúan su centro de gravedad justo en la punta (justo en el punto de apoyo!).
Pues eso es todo por mi parte. Sigo animándoos a escribir vuestras dudas y curiosidades a los.porques@gmail.com.
Nota: En este artículo no he distinguido centro de masas, de gravedad y geométrico; abogando por la sencillez de comprensión. A su vez, para el cálculo del centro de gravedad aproximado de la torre de Pisa, ésta se ha supuesto homogénea.
Siempre es un buen momento para mirar a la Luna. Quizás vivimos ajenos a la gran belleza que noche tras noche nos regala la naturaleza. Pero, ¡ahí está! ¿Y por qué especialmente hoy debemos alzar nuestros ojos al cielo?
Hoy, se va a dar un hecho que sólo se repite cada 18 años!! Hoy coincide que hay luna llena en el momento de máxima aproximación de nuestro satélite a la Tierra. No sé si sabréis, que la órbita que describe la Luna alrededor de la Tierra es elíptica. Por ese motivo, hay un punto en el que la Luna está más lejos de la Tierra (apogeo) y otro en el que está más cerca (perigeo). La diferencia es de 50000km, lo cual, aunque parezca mucho, no es tanto.
Con motivo de este acercamiento, la Luna parecerá un 14% más grande de lo normal y mucho más brillante. Lo astrónomos recomiendan verla en los primeros momentos de la noche, cuando la Luna está cerca del horizonte. Al parecer, y debido a algún efecto óptico no muy bien entendido, cuando la Luna está baja, es cuando nos parece más grande.
Por lo que he leído en los medios, circula por la red una serie de previsiones catastrofístas para esta noche. No más lejos de la verdad, las mareas y cualquier efecto de la Luna sobre la Tierra, no serán significativamente diferentes a otros días. Así que no os alarméis, y sobre todo, no os dejéis engañar!
Para terminar un vídeo de la NASA, donde se explica todo lo anteriormente relatado. Aunque está en ingles, está subtitulado y se entiende muy bien.
¿Por qué no había un cráter debajo de la nave? ¿Por qué no se ven las estrellas en las fotos? ¿Por qué sólo se ha ido una vez?¿Y por qué no se ha vuelto? ¿Por qué ondeaba la bandera si no hay atmósfera? ¿Por qué no podemos observar los módulos lunares con un telescopio?
Cada vez me encuentro más gente (científicos e ingenieros incluidos) que ponen en duda o no están plenamente seguros de que el hombre llegó a la Luna. Todo por culpa de unos rumores y conspiraciones en contra de uno de los hechos científicos más importantes de la historia de la humanidad. Basta que alguien enuncie alguna de las anteriores preguntas; para que tiemble todo su saber y se ponga en entredicho una evidencia. Nadie se preocupa en investigar un poco más, en ir más allá y averiguar la verdad o las causas.
El otro día me terminé un libro escrito por un compañero blogger, donde anaiza 50 preguntas de esta índole y les da respuesta. Se titula: "La conspiración lunar, ¡vaya timo!" y sin duda os lo recomiendo. Está escrito de una manera didáctica y con un lenguaje cercano, como el que solemos utilizar aquí, para que todos lo puedan entender.
La cosa es que leyendo este libro me dí cuenta de la cantidad de hipótesis, absurdas si uno se para un poco a pensarlas, que la gente hace con tal de tumbar un hecho: se llegó a la Luna.
Para no alargar, no voy a reproducirlas todas (si alguien tiene alguna concreta que la comente y la analizamos). Lo que sí voy a hacer es presentar pruebas irrefutables de que sí que llegamos a la Luna:Para empezar las miles de fotos que se realizaron, donde se puede ver que el hombre sí estuvo allí. Es curioso cómo no dudamos de que Obama sea el presidente de EEUU (a pesar de no haberle visto nunca), pero sí de este acontecimiento. Por cierto, la NASA ha hecho todas públicas y las podéis encontrar aquí.
En los vídeos de los paseos lunares se puede observar un lugar sin atmósfera: la bandera no ondea, y el polvo levantado por los pies al andar cae rápidamente (en la Tierra quedaría suspendido en el aire). Esto no se puede reproducir en ningún laboratorio.
Es muy famoso el experimento realizado por el astronauta Scott del Apollo XV en el que se puede ver cómo un martillo y una pluma caen con la misma velocidad. Esto que parece tan simple, lo predijo Galileo hace muchísimos años, pero no ha podido comprobarse hasta que el hombre llegó a la Luna. Este notable retraso es debido a que se necesitaba un lugar estanco, sin aire (al vacío), lo suficientemente grande como para llevarlo a cabo.
En el anterior experimento y en todos los vídeos, se observa cómo la aceleración es mucho menor a la de la Tierra. El martillo tarda más de 1s en llegar al suelo, y en todos los vídeos los astronautas van dando botes por la superficie lunar. Esto, al igual que lo anterior, es imposible de simular.
Se han traído más de 300 kg de rocas lunares. ¿Y quién me asegura que son de la Luna? Pues sus microporos, por ejemplo, muestran que se formaron con una gravedad mucho menor a la terrestre. Por otro lado, los geólogos analizando su antigüedad descubrieron que eran mucho más antiguas que cualquier roca terrestre. Al no haber atmósfera, ni erosión, en la Luna, estas piedras se han conservado intactas durante millones de años, mientras que en la Tierra hace mucho que desaparecieron.
El argumento más plausible, para mi, es lo que la NASA ha considerado el objeto más importante que se dejó en la Luna. Se trata ni más ni menos de unos espejos orientados hacia la Tierra. Estos espejos han sido utilizados (y lo seguirán siendo) durante décadas para medir con precisión la distancia de la Tierra a la Luna. Multitud de universidades y centros, han estado apuntando con lásers a estos espejos y, midiendo el tiempo de retorno, calculaban la distancia con precisión de centímetros! Parece increíble que hoy en día se sigan utilizando experimentos que se dejaron en la superficie de la Luna hace 40 años.
Por último, no creéis que si todo fue un montaje, lo rusos habrían sido los primeros interesados en desmontarlo. Ni uno se ha quejado ni puesto en duda el triunfo de EEUU. Aceptaron su derrota en la carrera espacial. Es triste que los principales "conspiradores" surjan de tu propio país: EEUU.
Antes de terminar, una noticia que, aunque se ha publicado hoy, es bastante antigua como podéis comprobar aquí. En ella nos enseñan fotos de los lugares de alunizaje y se ven claramente los módulos de descenso.
Sinceramente, quien quiera entender que entienda. Aquí sólo he detallado algunos de los argumentos irrefutables (a diferencia de los que intentan desbancar este hecho), pero hay muchos más. Para quien quiera indagar un poco más, a parte del libro, os recomiendo este documental para cuando tengáis tiempo. Aquí también se desmienten muchas de las teorías de la conspiración y está explicado todo de una manera muy sencilla.
Y como sé que alguno aún está dando vueltas a las preguntas del principio, aquí van las respuestas:
Para terminar quisiera animaros a ser críticos en la vida, a tener juicio y no creerse uno todo lo que digan los demás. Por supuesto sé que mucha gente no estará de acuerdo con lo escrito aquí, así que os recuerdo que para eso tenemos los comentarios, para crear debate. Toda opinión será bien recibida. Y ya puestos podéis estrenar las cuentas de Facebook y Twitter!
De vez en cuando aparecen en las noticias titulares del estilo: "Científicos descubren una estrella que explotó hace 1500 años". ¿Y cómo lo saben si no estaban allí? Y es que, los astrónomos parecen estar empeñados en subir al espacio cada vez telescopios más y más potentes que les permitan mirar más y más lejos. ¿Por qué ese afán? ¿Por qué quieren mirar tan lejos?
(Telescopio espacial Hubble)
No es que se hayan aburrido de las estrellas más cercanas, ni que se las sepan de memoria, no. Lo hacen porque mirando tan lejos puedes ver el pasado. ¡Así es! Y esto no es nada nuevo, no os vayáis a pensar que se ha descubierto una máquina del tiempo o algo por el estilo. Fijaros que yo no he dicho viajar al pasado, sino ver el pasado. Como se suele decir, el espacio es una ventana hacia el pasado.
Vamos a explicarlo un poquito. Seguramente habréis oído, que un truco casero para saber a qué distancia ha caído un rayo, es contar los segundos desde que lo ves, hasta que oyes el trueno, y dividir entre 3. El sonido viaja rápido (a uno 340 m/s), sin embargo la campeona de las velocidades es con mucho la luz (300.000 km/s!!). Por este motivo, si un rayo cae a 1km, lo veremos casi instantáneamente, mientras que el trueno (el sonido) tardará 3 segundos en llegar a nosotros. El sonido, a pesar de ser rápido, en grandes distancias no es lo suficiente y tarda un tiempo en llegar a nuestros oídos.
Pues lo mismo pasa en el espacio con la luz. La luz, que era la superchampion de la velocidad, en la inmensidad del espacio, se queda corta. Las distancias son tan tan grandes, que hasta la luz sufre ese retraso hasta que llega a nuestros ojos. Si recordáis la anterior entrada de ¿Por qué no se puede superar la velocidad de la luz?, contábamos que un año luz, no es una medida de tiempo, sino de longitud (en concreto es la distancia que recorre la luz en un año). Cuando decimos que una estrella está a 4 años luz, significa que la luz que proviene de ella ha tardado 4 años en llegar hasta nosotros. Por lo tanto, al mirar a esa estrella, lo que estamos viendo, lo que llega a nuestros ojos, no es lo que ocurre en la actualidad allí, sino lo que pasó en esa estrella hace 4 años. ¡Estamos viendo el pasado!
Extrapolando esto, si observamos una estrella que se encuentra a un millón de años luz, estamos viendo cómo era el universo hace un millón de años!! De ahí viene el interés de los astrónomos por mirar tan lejos. De cara sobretodo a investigar el origen del universo y cómo fueron sus primeros pasos, esta técnica se hace muy necesaria.
¿Y el récord? Pues creo que por ahora está en ver lo que ocurrió hace 13 mil millones de años. ¡Ahí es nada!
Recordaros que podéis dejar vuestras preguntas en los comentarios o bien escribir a: los.porques@gmail.com.
Sí, no es coña. En esta entrada responderemos a esta eterna pregunta que tanto os ha comido la cabeza. Tengo una amiga que desde que creé el blog me vacila con ello, y hoy por fin querida Rebeca, lo creas o no, ahí va la respuesta.
Para empezar, veamos qué son las nubes. Muchísima gente cree que las nubes son vapor de agua que flota por el aire. O al menos parecen algo gaseoso, liviano... No más lejos de la realidad. Las nubes están compuestas por gotitas (muy muy pequeñas) de agua que se suspenden en el aire. Así que, así es, las nubes son líquidas!
Cuando el vapor de agua que contiene el aire asciende, llega un momento en que alcanza zonas de menor temperatura y se condensa. Para ello necesita nucleantes que le ayuden, tales como polvo, cenizas, ... Al condensarse se forman gotitas de agua minúsculas que dan lugar a la nube. Por supuesto, cuando esas gotas se hagan más y más grandes, llegará un momento en que caerán al vacío en forma de lluvia.
Volviendo a nuestra pregunta. Si las nubes son agua, y el agua, como bien hemos aprendido desde niños, es incolora, inodora e insípida; la solución es sencilla: las nubes no huelen a nada!!
La verdad es que ¡ojalá! Los que vivimos en grandes ciudades hace mucho que el aire que nos rodea dejó de ser inodoro, pero eso es otro tema que hoy no viene al caso.
Para terminar, quisiera recordaros que podéis enviar vuestras preguntas (aunque sean tan chorras como esta) a los.porques@gmail.com.
PARA QUIEN QUIERA SABER MÁS:
Os enlazo un post de mi compañero Eugenio Manuel que me gustó mucho y sobre el que he basado esta entrada:
Vamos a comenzar el año con una pregunta que me habéis enviado varios de vosotros:
Hola Jesus,
mi pregunta es porque los vientos cruzados pueden derribar una aeronave de 60 toneladas, que posee 2 potentes motores? gracias,espero tu respuesta.
Luz
Felices Fiestas!!! Bueno cómo vas a tener tiempo para preparar nuevas entradas aquí va una, qué son las llamadas "turbulencias" de un avión? Un abrazo enorme Vic Mi intención es que cuando terminéis de leer esta entrada digáis: "Pues para lo que se debería de mover, la verdad es que no se nota casi nada".
Para ello voy a poneros el siguiente ejemplo. Poned un trocito de papel flotando en un vaso de agua, será nuestra avión. Nosotros iríamos montados en él. Los aviones, al igual que nuestro papelito flotan en un fluido, el aire. Si el agua está calmada y no se mueve, el papel estará quieto en su sitio, casi sin sufrir "meneos".
Sin embargo, nuestro avión se mueve respecto al aire, de hecho se mueve muuuy rápido. Como no podemos poner nuestro papelito a 1000km/h, simplemente empujadlo con el dedo y soltadlo. Veréis que en su movimiento ya comienza a oscilar y no es tan estable como al principio.
Pero no todo queda aquí. Hasta ahora el agua de nuestro vaso estaba quieta, pero con el aire no ocurre lo mismo. El aire sufre continuos cambios de temperatura, presión, corrientes, ráfagas, vientos... Probad a mover el vaso y os resultará imposible que el papel se esté quieto, sin moverse.
Todas estás acciones hacen que la fuerza que mantiene al avión en el aire (la sustentación) pueda variar repentinamente. La sustentación depende de la densidad del aire, y si el avión entra en una corriente de aire caliente, por ejemplo, puede perder parte de su sustentación de golpe, dando lugar a una turbulencia (como si el avión pasara por unos baches). Ni que hablar entonces de ráfagas de aire que golpeen el avión o hagan variar su velocidad respecto al aire (es lo que más influye en la sustentación). Entenderéis ahora el mérito que tiene que el avión se mueva tan poco a lo largo de un viaje.
El avión, por supuesto, está diseñado para absorber la mayor parte de esas turbulencias. Por eso, el pasajero no tiene sensación de estar volando, a diferencia de nuestro papelito. Además, el avión dispone de un sistema (el weather radar) que le indica donde están las tormentas y corrientes, para que pueda evitarlas.
Sin embargo, a pesar de todo esto, puede ocurrir, como Luz decía, que un avión pequeño se vea en algún apuro de encontrarse con turbulencias severas o extremas. Me explico. En crucero, no pasa nada: pierdes un poco de altura, un susto y vuelves a recuperar el control. Pero imaginad que justamente se da en la aproximación final, con baja visibilidad y a pocos metros del suelo. Esa perdida de altura podría ser fatal. Por este motivo, se prohíben los aterrizajes cuando las condiciones son adversas o el viento supera cierta velocidad. Cuando no se cumplen estas recomendaciones, es cuando ocurren los accidentes.
Para terminar, y para mostraros que lo normal (y si se siguen las recomendaciones) es que no pase nada, os dejo unos impresionantes aterrizajes con viento cruzado y ráfagas laterales en el aeropuerto de Hong Kong. No es exactamente turbulencias, pero merecen la pena:
No quiero irme sin dejar de animaros a que enviéis vuestras dudas y preguntas a los.porques@gmail.com.
Desde Los Porqués quisiera desearos a todos unas felices fiestas y que paséis estos días tan entrañables con vuestra familia y todos vuestros seres cercanos. Aunque últimamente estoy un poco ausente, prometo regresar a la vuelta con entradas iguales o mejores que las de este año.
Quisiera aprovechar este momento para hacer balance del Blog durante este año. La casualidad ha querido que hoy mismo hagamos 25.000 visitas!!! Aunque si hay que hacer honor a la verdad, fueron superadas hace mucho, ya que el contador se añadió 3 meses más tarde. ¡Pero bueno!
Quien me iba a decir cuando empecé esta aventura que, no sólo iba a tener tan buena acogida, sino que iba a durar tanto. Aquí, el que suscribe, le ha puesto muchísima ilusión, empeño y trabajo, pero sin lugar a duda, el mérito es todo vuestro. Desde el primer momento le habéis dado buena acogida (me acuerdo que fuimos portada de meneame con tan sólo 2h de vida!), habéis participado enviando vuestras dudas y curiosidades, le habéis dado vida con vuestros comentarios (tanto agradeciendo, como debatiendo) En fin, que como siempre habéis sido vosotros quienes habéis hecho este blog vuestro. Doy el objetivo por cumplido. Por todo ello y más: